Típicas personas que deciden irse de fiesta a una ciudad completamente extraña. Se hospedan en un hostal, donde se sabe los extranjeros son la carnada perfecta para embriagar. Después de esto se convierten en mercancía, y se venden al mejor postor; algún millonario psicópata que se encargara de satisfacer su necesidad de torturar y asesinar.
OPINIÓN:
Definiría estas películas como un gore algo “light”, (esto debido a la gran cantidad de efectos especiales que utilizan y le restan credibilidad, en cuanto a intenciones son buenas escenas), pero con un argumento e historia muy válidos, y escalofriantes hasta cierto punto, más si eres un tonto que se hincha de alcohol con desconocidos.
La primera parte una especie de introducción, y que en este caso son unos chicos los victimados, con una serie de desconciertos muy agudos por parte del que se convierte en el protagonista, y le logran dar un giro emocional de lo que se convierte en una persecución.
Ahora vamos con la segunda parte, en la cual cabe destacar el inicio tan estúpido, que no puedo revelar porque se convertiría en spoiler, pero de verdad fue muy injusto. Bueno pues las que ahora se meten en líos son unas chicas, la trama se desarrolla de la misma manera, para dejarnos con un final decente pero predecible ya para la mitad de la película.
Otra película más para dominguear, pero confesando me dejo la lección de evitar hospedarme en un hostal.
Lo mejor:
La trama y todo ese thriller
Lo peor:
Las actuaciones de la segunda película
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